Los transportistas autónomos levantan la voz contra los fabricantes por vender camiones sin el nuevo tacógrafo

La renovación y actualización de la tecnología en el sector del transporte de mercancías es un proceso constante y necesario para garantizar la seguridad vial y la eficiencia en la logística.

Recientemente, se ha impuesto una nueva regulación en la Unión Europea que establece que todos los camiones matriculados a partir del 21 de agosto deben estar equipados con tacógrafos digitales de segunda generación, con el fin de mejorar el control y la gestión de las jornadas de trabajo de los conductores y asegurar un cumplimiento adecuado de los límites de tiempo de conducción.

Sin embargo, la implementación de esta medida no ha estado exenta de desafíos y costos para el sector del transporte, lo que ha generado preocupaciones entre los transportistas y las asociaciones del gremio.

La falta de stock de tacógrafos digitales de segunda generación

Uno de los principales problemas que ha surgido con la implementación de la nueva regulación es la falta de disponibilidad de tacógrafos digitales de segunda generación en el mercado. A pesar de que la ley establece la obligación de utilizar este nuevo dispositivo, los fabricantes se han visto imposibilitados de cumplir con esta demanda debido a la falta de stock. Como resultado, muchos transportistas han recibido camiones nuevos con tacógrafos de primera generación, lo cual es contrario a la normativa vigente.

La postura de FETRANSA y la exigencia de los costos

La Federación Española de Transporte por Carretera (FETRANSA) ha tomado una postura firme en relación con esta situación. Han instado a los fabricantes a asumir los costos de la instalación de los nuevos tacógrafos digitales de segunda generación en los vehículos nuevos, argumentando que los transportistas no son responsables de la falta de dispositivos. La inversión necesaria para modificar el modelo de tacógrafo implica un costo adicional de alrededor de 1.200 euros por vehículo, una carga financiera que los transportistas autónomos no están dispuestos a asumir, especialmente en un contexto de aumento de costos en el sector.

Consecuencias para el proceso de matriculación y venta de vehículos

El proceso de doble matriculación como medida paliativa ha generado inquietudes adicionales en el sector del transporte de mercancías. El hecho de que los vehículos cuenten con dos fechas de matriculación, una previa al 21 de agosto de este año y otra posterior, puede afectar el valor de los vehículos en el mercado de compra-venta. Para los compradores, la fecha de matriculación incide en el valor del vehículo, y esta situación de doble matriculación podría complicar el proceso de comercialización de camiones.

Fechas de aplicación en el proceso de instalación de los nuevos tacógrafos

La regulación establece fechas específicas para la aplicación del nuevo tacógrafo digital de segunda generación:

• Desde el 21 de agosto de 2023: Todos los camiones de nueva matriculación deben estar equipados con los nuevos tacógrafos.
• Desde el 1 de julio de 2024: Los conductores deben llevar las hojas de registro del día en curso y los 56 anteriores.
• Desde el 31 de diciembre de 2024: Los vehículos en transporte internacional que llevan un tacógrafo analógico o digital no inteligente anterior al 15 de junio de 2019 deben instalar un tacógrafo inteligente de segunda generación.
• Desde el 21 de agosto de 2025: Los vehículos en transporte internacional que tienen un tacógrafo inteligente de primera generación deben sustituirlo por el de segunda generación.
• Desde el 1 de julio de 2026: Los vehículos ligeros de entre 2.5 y 3.5 toneladas de MMA que realizan transporte internacional deben instalar un tacógrafo.

Conclusiones

La implementación de los nuevos tacógrafos digitales de segunda generación en el sector del transporte de mercancías ha enfrentado una serie de desafíos, entre ellos la falta de stock, los costos adicionales y la complicación en el proceso de matriculación y venta de vehículos. Las asociaciones de transportistas, como FETRANSA, han expresado su preocupación y han solicitado que los fabricantes asuman los costos de los nuevos dispositivos. Es esencial que se busquen soluciones y se llegue a un acuerdo para garantizar la implementación efectiva de la regulación y evitar cargas financieras adicionales para los transportistas autónomos y las empresas del sector. La cooperación entre los fabricantes y las autoridades competentes es fundamental para garantizar una transición suave hacia los nuevos tacógrafos digitales de segunda generación y mantener la eficiencia en la logística de transporte de mercancías.